Lindo dia para caminar (Erick J. Hutchinson)

Era ya media tarde y lo cierto era que el dia estaba hermoso. Habia algo de sol aun y viento a su vez, algunas nubes se movian en el cielo pero no tapaban lo que quedaba de luz. Detuve mi caminata en mitad de una plaza y al ver un sauce lloron me acerque a el, sentandome en sus raices, apoyando mi espalda contra el tronco. Al sentir como una rafaga de viento aparecia, cerre los ojos unos instantes, disfrutando de ella. Habia olvidado el ipode en casa y como no tenia ninguna intencion en volver a buscarlo solo me mantenia en mi tranquila posicion, escuchando los pasos que de mi alrededor pero sin prestar atencion a nadie ni a nada.

Me acercaba o no. Ahí estaba el dilema, digamos que no estaba demasiado seguro que si al acercarme iba a recibir un par de hostias de la chica. Llevaba casi cinco minutos debatiéndome si acercarme a donde estaba ella. No es que la estuviera siguiendo ni nada por el estilo, psicópata no estaba entre la lista de mis características. Estaba ahí, de lo mas bien sentado en el banco de la plaza, fumando un cigarrillo cuando mi visión había sido opacada por ella, la había visto caminar hasta el árbol y sentarse ahí con tranquilidad. ¿Estaba esperando a alguien? Quizás…o quizás no.

Negué con la cabeza como el grandísimo idiota que me estaba comportando en aquel momento. Alce la mirada al cielo, mientras dejaba caer el cigarrillo a mi lado y lo pisoteaba, antes de ponerme de pie y sacar un nuevo cigarrillo dejándolo entre mis manos mientras caminaba hasta la muchacha.-Hey, ¿tienes fuego?-si eso era patético, y podía sentir incluso como mi encendedor palpitaba en el bolsillo trasero de mis jeans, pero eso ella no tenia porque saberlo-Por favor…-agregue luego de un par de segundos. Me sorprendía saber que en ocasiones si me acoraba de mi educación.

Al escuchar que alguien hablaba abri los ojos con curiosidad, para encontrarme con que era a mi a quien estaban hablando. Me mordi el labio inferior mirandolo fugazmente de pies a cabeza y finalmente terminando con mis ojos fijos en los suyos. Justo alli venia a cruzarlo a el. En ese momento agradeci a las casualidades. Asenti con la cabeza como respuesta y termine dedicandole una media sonrisa.
- Si, claro - murmure en voz baja, mientras me dedicaba a buscar el encendedor en mis bolsillos. No recordaba donde lo habia guardado pero estaba segura que lo tenia por algun lado. Volvi a morderme el labio hasta que finalmente lo encontre pasados unos segundos - toma, aqui tienes - dije volviendo a sonreirle mientras le ofrecia el encendedor.

Me dedique a observarla buscar el encendedor. Vale, todo aquel maestro plan para acercarme a ella se iría a la mierda si ella no tenía un encendedor. Y realmente no lo había pensando del todo bien y es que… ¿Qué le iba a decir después de eso? Vale, Erick, tienes que relajarte, que cuando estas relajado las cosas salen mejor. O por lo menos eso esperaba. Y después de unos segundos el encendedor estaba frente a mí, entre sus manos. Me agache levemente para tomarlo y encender así el cigarrillo mientras le daba una calada y de manera natural liberaba el humo. Vale, había que arriesgarse alguna vez en la vida.

-¿Te molesta si me siento a tu lado?-No iba a esperar respuesta. Más que mal yo era Erick Hutchinson y la mayoría del tiempo hacia lo que se me diera la gana. Y estaba estudiando ciencias políticas y ahí había aprendido que era un país libre y yo podía hacer lo que quisiera. Por eso justamente me senté al lado de la muchacha, doblando las piernas para dejar reposar mis brazos en las rodillas, mirando hacia el frente.

-¿Quieres uno?-le pregunte después de un par de segundos a la muchacha mientras abría la cajetilla de cigarros en su dirección-Soy Erick, pensé que…-carraspee, observándola de reojo-Deberías saber eso-termine de decir estúpidamente mientras maldecía por dentro. ¿Qué mierda me sucedía?

Lo mire fijamente los segundos que tardaba en dar una calada y soltar el humo. Escuche su pregunta. Por supuesto que no me molestaba que se sentara a mi lado, mas bien todo lo contrario pero no llegue a responderle que ya habia tomado asiento. No podia negar que esa actitud suya me gustaba, me llamaba la atencion. Volvi a acomodarme en el tronco del arbol justo antes de que el volviera a hablar.
- De acuerdo - respondi tomando uno de los cigarros y prendiendolo tranquilamente. Erick, se llamaba Erick. Di una calada al cigarrillo y lo mire con una media sonrisa mientras soltaba el humo con cierta lentitud - Tu tambien deberias saber el mio.. me llamo Alexia - murmure en voz baja antes de volver a fijar mi mirada justo frente a nosotros, aunque como quien dice, miraba sin mirar nada en realidad - puedes decirme Alex, pero si se te ocurre algun apodo mas.. original, lo aceptare con gusto - comente y di otra calada al cigarro, tentada de cerrar los ojos al sentir una suave rafaga de viento.

Así que finalmente podía ponerle un nombre a la chica desconocida. Claro que ya no solía ser tan desconocida como antes, le había divisado en varias oportunidades por la ciudad. Hasta ahora nunca me había atrevido a entablar ninguna conversación con ella. Estaba sospechando levemente que solo el alcohol me daba el poder para desinhibirme y abordar de aquella manera a las chicas. Asentí con la cabeza al escuchar su nombre y encendí el encendedor que ella misma me había prestado segundos antes para encender el cigarrillo, le tendí el encendedor luego. Solté una pequeña risita mientras continuaba mirando hacia el frente, de vez en cuando mis ojos se desviaban hasta observarla de reojo.

-No soy bueno creando apodos, así que simplemente serás Alex-dije dándole nuevamente una calada al cigarro y soltando el humo luego, natural, era lo que se suponía había que hacer-Y bien Alex…¿Qué haces? ¿Estudias supongo?-Ya que había empezado ahora no me iba a detener. Las preguntas eran mi especialidad siempre y cuando estas no estuvieran destinadas a mi.

Eche una rapida mirada a nuestro alrededor, volviendo a agradecer a las casualidades. Gracias a una pura casualidad ahora sabia el nombre y no solo eso sino que estaba hablando con el, estaba teniendo una conversacion o lo que fuese, cosa que antes habia creido que no se daria. Me mordi levemente el labio antes de volver a dar otra calada al cigarrillo, soltando el humo segundos despues. Escuche su comentario sobre los apodos y volvi mi rostro hacia el, sonriendole.
- Estudio, es mi ultimo año en la escuela - respondi asintiendo levemente con la cabeza - ¿Tu estudias tambien? pero supongo que no en la escuela ¿verdad? no te he visto por alli - comente con mi mirada aun en el, aunque pasados unos instantes volvi a fijarla en frente de nosotros. Era cierto, no lo habia visto en la escuela, por eso habia llegado a la conclusion de que era mas grande que yo y que si acaso estudiaba, lo hacia en la universidad.